Los cálculos renales son un problema común que se deriva en muchas ocasiones de nuestra dieta y estilo de vida, por eso una vez que somos diagnosticados ciertos cambios alimenticios ayudarán a disminuir los síntomas y mejorar nuestra condición. Si te preguntas cómo comer si tienes cálculos renales, te damos todas las recomendaciones necesarias para mejorar tu condición.
Uno de los hábitos más importantes que debes incluir en tu rutina diaria si padeces de cálculos renales es beber agua. Esta condición es más común en personas que ingieren poco líquido y que por ende orinan poco.
Es importante consumir entre litro y medio y dos litros de agua al día, siempre de baja mineralización pues el calcio puede empeorar los cálculos en los riñones. Además se recomienda reducir la ingesta de bebidas con cafeína o teína ya que pueden producir deshidratación.
Toma en cuenta que, aunque en las primeras horas del día es normal que tu orina sea oscura, a lo largo del día se debe ir aclarando, si esto no ocurre es porque no bebes suficiente líquido.
Las piedras en el riñón se forman en muchas ocasiones por el exceso de calcio, por eso al momento de comer si tienes cálculos renales es muy importante que reduzcas la ingesta de alimentos ricos en calcio.
Consume sólo dos porciones diarias de lácteos, preferiblemente bajos en grasa. Modera la ingesta de leche, yogur, queso y mantequilla.
Si optas por agua envasada, elige la de baja mineralización.
Reduce también el consumo de otros alimentos ricos en calcio para mantener tus riñones saludables.
Al momento de consumir proteínas, deberás elegir las carnes magras. Esto es especialmente importante al comer si tienes cálculos renales y padeces también de ácido úrico alto. En este caso opta por pollo, pavo, pescados blancos y carne magra con muy poca grasa.
El exceso de sal en la dieta favorece la retención de líquido lo que puede agravar el cuadro de piedras en los riñones. Por eso es importante llevar una dieta baja en sal y evitar alimentos deshidratados, encurtidos, sopas de sobre y preparadas y otros productos altos en sal, como los embutidos.
Otra recomendación importante respecto a la dieta si tenemos cálculos renales es ingerir de forma moderada productos ricos en grasa. Los embutidos, postres, helados, leche entera, frituras y comida chatarra deben consumirse solo de forma eventual, pues los alimentos muy grasosos empeoran el cuadro. DE HECHO, LA COMIDA CHATARRA DEBE SER ELIMINADA POR COMPLETO DE CUALQUIER DIETA HUMANA.
Muchos cálculos en los riñones están formados de oxalato de calcio, en esos casos es recomendable evitar ingerir ciertos alimentos que lo contengan como los mariscos, la espinaca, la remolacha, el chocolate, los pimientos y los pescados azules.
Uno de los hábitos más importantes que debes incluir en tu rutina diaria si padeces de cálculos renales es beber agua. Esta condición es más común en personas que ingieren poco líquido y que por ende orinan poco.
Es importante consumir entre litro y medio y dos litros de agua al día, siempre de baja mineralización pues el calcio puede empeorar los cálculos en los riñones. Además se recomienda reducir la ingesta de bebidas con cafeína o teína ya que pueden producir deshidratación.
Toma en cuenta que, aunque en las primeras horas del día es normal que tu orina sea oscura, a lo largo del día se debe ir aclarando, si esto no ocurre es porque no bebes suficiente líquido.
Las piedras en el riñón se forman en muchas ocasiones por el exceso de calcio, por eso al momento de comer si tienes cálculos renales es muy importante que reduzcas la ingesta de alimentos ricos en calcio.
Consume sólo dos porciones diarias de lácteos, preferiblemente bajos en grasa. Modera la ingesta de leche, yogur, queso y mantequilla.
Si optas por agua envasada, elige la de baja mineralización.
Reduce también el consumo de otros alimentos ricos en calcio para mantener tus riñones saludables.
Al momento de consumir proteínas, deberás elegir las carnes magras. Esto es especialmente importante al comer si tienes cálculos renales y padeces también de ácido úrico alto. En este caso opta por pollo, pavo, pescados blancos y carne magra con muy poca grasa.
El exceso de sal en la dieta favorece la retención de líquido lo que puede agravar el cuadro de piedras en los riñones. Por eso es importante llevar una dieta baja en sal y evitar alimentos deshidratados, encurtidos, sopas de sobre y preparadas y otros productos altos en sal, como los embutidos.
Otra recomendación importante respecto a la dieta si tenemos cálculos renales es ingerir de forma moderada productos ricos en grasa. Los embutidos, postres, helados, leche entera, frituras y comida chatarra deben consumirse solo de forma eventual, pues los alimentos muy grasosos empeoran el cuadro. DE HECHO, LA COMIDA CHATARRA DEBE SER ELIMINADA POR COMPLETO DE CUALQUIER DIETA HUMANA.
Muchos cálculos en los riñones están formados de oxalato de calcio, en esos casos es recomendable evitar ingerir ciertos alimentos que lo contengan como los mariscos, la espinaca, la remolacha, el chocolate, los pimientos y los pescados azules.
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Publicado por: Anunciadora de Sión
SOY CREYENTE EN YAHSHUA
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